CDMX, 3 de marzo del 2023.- La conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador fue prácticamente monotemática al tratar casi en exclusiva este asunto que tiene muy dividido al Poder Legislativo y extremadamente activa a la oposición política y en especial los comisionados del Instituto Nacional Electoral (INE) donde pronto dejarán el cargo sus dos líderes principales, Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, los más criticados por su conservadurismo.
El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, fue invitado por López Obrador para que aclarara los alcances de las modificaciones a varias leyes secundarias dirigidas básicamente a rebajar los altísimos salarios y las enormes prebendas financieras adicionales a los consejeros que superan los 10 a 15 mil dólares mensuales, dos o tres veces más lo que el gana el presidente de la República.
Adán Augusto dijo que con el Plan B, a pesar de ser muy limitado en comparación con la reforma electoral que fue vetada en el Congreso donde el gobierno perdió la mayoría calificada, pone fin a la «burocracia dorada» del INE porque le elimina muchos privilegios a sus jerarcas.
Aclaró que, contrario a la intensa campaña mediática de la oposición y de la prensa conservadora, no se le quitan facultades al organismo electoral y rechazó que haya despidos masivos, además de que tampoco están en peligro los procesos electorales ni los conteos rápidos.
El Plan B se concentra, dijo, en la eliminación del derroche de dinero, en los privilegios injustificados como el escandaloso seguro médico privado para gastos mayores que se presta para todo tipo de corrupción y llenarse los bolsillos, o los fideicomisos específicos.
La aclaración de cuál es el sentido del Plan B la solicitó el propio López Obrador ante la evidencia mostrada en la televisión de que una gran cantidad de personas que marchó el domingo pasado en favor del INE ni siquiera conocían o sabían el contenido del Plan B, lo cual demostró que se trató de una manifestación contra el programa del gobierno.
En cuanto a la batería de impugnaciones que ya están preparando los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional empujados por el empresario Claudio X González y varios intelectuales conservadores, el secretario de Gobierno les advirtió que contraten a un buen abogado porque no hay marcha atrás en las reformas por mucho que la corrupta Suprema Corte lo intente.
Desmintió que con la reforma a las leyes haya un despido laboral masivo y dijo que esté apenas representará un 7,0 por ciento de los 17 mil 500 trabajadores del instituto, muchos de ellos cargos fantasmas que en México se le denomina “voladores” porque están solamente en nómina.
Afirmó, que la reforma no pone en riesgo las elecciones pues todo el mecanismo va a seguir operando de forma normal, y mencionó sanciones a lo ilegales financiamientos a candidatos como la compra de votos.
mem/lma