GOODBYE AMERICAN HEROE, NOVELA QUE TRASCIENDE FRONTERAS
• Goodbye, American Hero es una novela que atrapa, cuyo personaje principal, el detective John Rossi, transita a través de la historia política sudamericana de las dictaduras, el neonazismo y la explotación del narcotráfico.
La historia política sudamericana, la dictadura, el neonazismo, narcotráfico y crimen organizado se entrelazan en la historia del torpe detective John Rossi, con pinceladas de realidad, en Goodbye, American Hero, del escritor argentino Eduardo Goldman, presentada este miércoles 15 de marzo por Editorial Aquitania Siglo XXI, de forma simultánea en México y Argentina.
La historia aborda los desafíos que enfrenta el detective John Rossi para trasladar a un testigo desde Paraguay hasta Nueva York. Además de su publicación en español, por primera vez sale al mercado en inglés con la traducción del afamado escritor norteamericano Norman T. di Giovanni.
Durante la presentación, en vivo, a través de las redes sociales de Aquitania Siglo XXI, el autor Eduardo Goldman dijo que plantea su trabajo a través de los personajes, quienes le dan humanidad a la novela.
“Para mí el personaje es lo más importante. Le da humanidad a la historia y verosimilitud, hace que una novela esté viva. Los personajes son personas que si le pones algo que no sientes, alguna cosa muy pensada y racional, puede resultar falso”, destacó Goldman.
Gabriel Wainstein, periodista, escritor y guionista de cine y televisión argentino, un lector que comparte con las y los oyentes su pasión por los senderos de un género literario, destacó que se trata de una novela demasiado divertida, que transita el género de la comedia negra y tiene un protagonista muy especial. John Rossi no tiene ninguna capacidad para hacer lo que debe hacer, y enfrentar lo que tiene que enfrentar, pero lo hace.
“Hay al mismo tiempo una fuerza ética y moral que lo hace ser muy valiente, lo delinea como un personaje interesante”, abundó durante la presentación.
Por su parte, Gabriela Guerra, Directora editorial de Aquitania Siglo XXI, agregó que a Rossi le suceden cosas que no deben. Destacó que las novelas de Goldman se desarrollan en el marco de dictaduras, como las que se registraron en distintos países de América del Sur, en escenarios políticos complicados. En este texto cuenta las hazañas de un simpático pero ingenuo detective norteamericano en su viaje por el Paraguay de Stroessner. “Una novela imposible de soltar”.
Eduardo Goldman refirió que el tema del militarismo y la dictadura siempre ha sido importante, porque durante su niñez vivió la opresión.
Dijo que cuando los chicos hablaban, los adultos decían ¡te callas! “Todo el tema de la dictadura, el militarismo, me hacen revelarme inmediatamente y me llevan a ponerme en esa situación”.
Luciano Walter, escritor y poeta argentino, autor de Breve historia de la civilización, dijo que hablar del detective John Rossi es imposible sin observar el arte que ilustra la portada del libro, de la Directora de Arte, Annia Galano: lo retrata al estilo “hollywoodesco”, con un escenario que responde a los cánones cinematográficos.
“La literatura de Eduardo Goldman es cinematográfica, el manejo de los tiempos, los trazos, la interrupción espacial sin que sea temporal, las lecturas de Eduardo te agarran de las pestañas y no te sueltan. Es una característica constante en su literatura”, agregó.
Gabriel Wainstein abundó que los “momentos cinematográficos” de la novela tienen una sagacidad que le dan contradicción y enriquecen al personaje. Habló de la extrapolación de la ciudad de Nueva York a la jungla paraguaya, y el trayecto de un personaje que gusta de comer pizza de tomate, como detalles que acercan y crean empatía y reflejan la fascinación del autor por la chocotorta y la comida italiana.
Goodbye, American Hero repite la constante de los libros de Goldman, el enorme crecimiento inesperado de los personajes, pocas novelas policiales como Ni siquiera nos queda París, la novela que sucede a Goodbye, American Hero, cuentan lo que fue nuestra dictadura militar, abundó Wainstein.
Esta no es una novela aburrida, es una experiencia literaria que el lector no se puede perder, una experiencia maravillosa y divertida de leer, no se queda en el paso de comedia intrascendente, siempre va mucho más allá, los personajes están vivos, es un placer para los lectores.