Adán Augusto busca una Suprema Corte justa y sin corrupción

Adán Augusto López Hernández, aspirante a coordinador nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación, ha levantado acusaciones contundentes contra los jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial en México, señalándolos de corrupción y comparando su comportamiento con el de los mercaderes de templo.

Durante una Asamblea Informativa en Pachuca de Soto, Hidalgo, Adán Augusto expresó su preocupación por la falta de justicia en el país y afirmó que se necesita una Reforma al Poder Judicial en el próximo año para abordar esta situación. Según sus declaraciones, los sectores más desfavorecidos de la sociedad son los más afectados por la injusticia, y enfatizó la necesidad de una Suprema Corte imparcial y justa. Además, denunció la corrupción presente en el sistema judicial y advirtió que si no se toman medidas, los jueces, magistrados y ministros podrían llegar incluso a vender estatuas dentro de la propia Suprema Corte.

El exsecretario de gobernación destacó la importancia de un cambio profundo en el sistema judicial, afirmando que la reforma propuesta en 2024 es fundamental para alcanzar la justicia deseada en México. Durante el evento, también mencionó que algunos ministros de la Suprema Corte reciben salarios mensuales de aproximadamente 600 mil pesos.

En la asamblea, trabajadores de Petróleos Mexicanos (PEMEX) mostraron su apoyo a Adán Augusto con consignas como «Petroleros con Adán» y «Adán, Presidente». Ante este respaldo, el político manifestó su compromiso de seguir defendiendo a la petrolera mexicana, haciendo hincapié en la importancia de proteger los derechos de los trabajadores y de los sindicatos.

Cumpliendo con su 62° compromiso, Adán Augusto reafirmó su dedicación para consolidar la Cuarta Transformación en México. Durante su discurso, resaltó su estrecha relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien considera su maestro y agradece haber aprendido de él el recorrido por todo el país y el compromiso con el pueblo mexicano.

López Hernández enfatizó que, aunque se necesita profundizar en la transformación del país, la revolución de las conciencias es un elemento fundamental e irreversible en la vida pública de México.