La influencia de las redes sociales en la percepción de la legitimidad de procesos electorales
Las redes sociales han revolucionado las elecciones en México, pero ¿son una herramienta de influencia o de manipulación?
Las redes sociales han transformado la forma en que los ciudadanos perciben y participan en los procesos electorales en México. Estas plataformas digitales han emergido como un medio influyente en la formación de opiniones y decisiones electorales, superando a los medios de comunicación tradicionales como la televisión y la radio.
Según una encuesta realizada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP), cuatro de cada cinco ciudadanos (79%) consideran que las redes sociales desempeñan un papel informativo más que activo. Además, el 76% de los encuestados cree que el uso de las redes sociales permite a la gente expresar su opinión de manera más abierta.
Sin embargo, la influencia de las redes sociales en las elecciones no está exenta de controversia. La aparición de audios generados artificialmente, que simulan voces de candidatos o líderes, ha sembrado incertidumbre en los procesos electorales.
Este fenómeno, conocido como «deepfakes», plantea desafíos significativos para la legitimidad electoral, ya que dificulta la capacidad de los votantes para discernir entre información real y falsa.
Además, las redes sociales también han sido utilizadas para manipular tendencias y polarizar la opinión pública.
Este tipo de manipulación puede socavar la confianza en los procesos electorales y contribuir a la división social.
Por otro lado, las autoridades electorales han tenido que ajustar sus criterios respecto al uso y, en ocasiones, abuso de las redes sociales. Esto incluye la imposición de sanciones por infracciones electorales cometidas a través de estas plataformas.
En resumen, las redes sociales han transformado la dinámica de los procesos electorales en México, tanto para bien como para mal. Aunque estas plataformas pueden facilitar el acceso a la información y promover la participación ciudadana, también pueden ser utilizadas para manipular la opinión pública y socavar la legitimidad electoral.