Antonio Martínez continuará al frente del SAT en el gobierno de Sheinbaum
Claudia Sheinbaum confirma que Antonio Martínez seguirá al frente del SAT en su gobierno. «Es el elegido» para continuar con la estabilidad fiscal de México.
CDMX a 12 de septiembre, 2024.- En una decisión que refuerza la continuidad en la política fiscal de México, Claudia Sheinbaum, presidenta electa de la República, anunció que Antonio Martínez Dagnino se mantendrá como titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en su próximo gobierno. Durante una conferencia, Sheinbaum aseguró que la permanencia de Martínez Dagnino y su equipo garantiza la estabilidad y el seguimiento de los proyectos en Hacienda.
«Antonio se va a quedar, prácticamente todo el equipo de Hacienda sigue, salvo el subsecretario de Egresos, quien se trasladará al Gobierno de la Ciudad», explicó Sheinbaum en su anuncio, confirmando que la estructura del SAT no sufrirá cambios significativos con su llegada al poder.
La permanencia de Antonio Martínez Dagnino en el SAT refleja la confianza de Sheinbaum en su gestión y en la estrategia fiscal actual. Martínez Dagnino, quien asumió el cargo en octubre de 2021, ha sido reconocido por su firme lucha contra la evasión fiscal y la implementación de políticas que buscan fortalecer la recaudación tributaria en el país. Su labor ha sido clave para mantener las finanzas públicas estables en un contexto económico global desafiante.
Con la continuidad de Martínez Dagnino, Sheinbaum garantiza que los esfuerzos para mejorar la eficiencia en la recaudación fiscal y cerrar las brechas de evasión e informalidad se mantendrán durante su mandato.
Claudia Sheinbaum también confirmó que la mayor parte del equipo de Hacienda continuará desempeñando sus funciones. La única excepción será el subsecretario de Egresos, quien se trasladará al Gobierno de la Ciudad de México, dejando su puesto vacante para una futura designación.
El enfoque de Sheinbaum en la estabilidad institucional y su decisión de mantener figuras clave en su gabinete refleja un compromiso con la continuidad de las políticas fiscales y económicas, especialmente en un área tan estratégica como el SAT.