Aumentan los nacimientos por cesárea en México: ¿Qué implica para las madres?

“Más que alarmarse ante este panorama, las mujeres deben prepararse para afrontar de la mejor manera la recuperación de su parto”, señala Lizeth Cuara, especialista en cuidados postparto.

En México, más de la mitad de los nacimientos ocurren mediante cesárea, según datos de la Dirección General de Información en Salud de la Secretaría de Salud. En 2024, el 56% de los alumbramientos fueron por esta vía, una cifra significativamente superior al 47% registrado en 2018. Estas cifras superan ampliamente las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugiere limitar las cesáreas al 10-15% de los nacimientos.

Lizeth Cuara, directora general de Misty Phases y especialista en soluciones para el cuidado postparto, explica que este aumento plantea retos importantes para la recuperación de las madres. “La recuperación de una cesárea es más compleja, ya que implica la cicatrización de siete capas de tejido en la pared abdominal y el útero. Aunque la piel puede sanar en 7 a 10 días, las capas profundas tardan de uno a tres meses, todo esto en un contexto donde las madres priorizan el cuidado de su bebé sobre su propia recuperación”, detalla.

Sinaloa lidera las estadísticas con el 65% de nacimientos por cesárea, seguido por Tamaulipas y Tlaxcala con 63%. En contraste, Guerrero (41%), Chiapas (45%) y San Luis Potosí (46%) presentan los porcentajes más bajos.

Cuara enfatiza que es fundamental que las mujeres sigan las indicaciones de su médico durante el periodo postparto. Entre las acciones sugeridas están mantener una alimentación balanceada y usar fajas postparto específicas, que no deben emplearse más de cuatro horas al día. Estas fajas, elaboradas con materiales transpirables como algodón o manta, ofrecen beneficios como soporte abdominal y en la herida quirúrgica, alivio del dolor, y mejora de la movilidad y la postura.

No obstante, la especialista advierte sobre el uso de fajas modeladoras que buscan definir la silueta. “Apretar el cuerpo con estas fajas puede debilitar los músculos abdominales, dificultar la cicatrización, e incluso causar problemas digestivos, respiratorios y circulatorios”, advierte.

“El posparto es una etapa fundamental para la recuperación integral de las madres. Por ello, nos hemos enfocado en diseñar soluciones que combinen prácticas tradicionales y modernas para atender las necesidades específicas de cada mujer”, concluye Cuara. Estas iniciativas buscan apoyar a las madres para que enfrenten su nueva etapa de vida de manera plena y saludable.