La demanda de tratamientos estéticos en México crece un 30 % desde 2020

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Impulsada por redes sociales y la pandemia, la industria estética mexicana se consolida como una de las más importantes de la región.

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La demanda de tratamientos estéticos en México ha experimentado un crecimiento notable, aumentando un 30 % desde 2020, según datos revelados por especialistas en el sector. Este auge se debe, en gran parte, a la influencia de las redes sociales, la exposición constante en cámaras durante la pandemia y el interés por mejorar la apariencia física, especialmente entre las mujeres.

El cirujano estético mexicano Andrés Rosales explicó que la pandemia de covid-19 jugó un papel clave en este incremento. “La gente estaba más expuesta a las cámaras por las reuniones en línea y a las redes sociales, lo que generó una mayor conciencia sobre la apariencia física”, señaló durante una conferencia. Además, destacó que México ocupa el cuarto lugar en demanda de procedimientos estéticos inyectables, solo por detrás de Brasil, Argentina y Estados Unidos.

Uno de los factores que ha contribuido a este crecimiento es el turismo médico. México se ha convertido en un destino atractivo para personas de Estados Unidos, ya que los tratamientos estéticos tienen un costo entre 30 % y 40 % menor en comparación con otros países, a pesar de utilizar los mismos productos y tecnologías. En promedio, una persona en México gasta entre 6,000 y 12,000 pesos (293 y 584 dólares) por un tratamiento estético.

La industria de la medicina estética en México genera ingresos anuales por 8,000 millones de dólares, según la consultora Markets and Markets. Se estima que este mercado podría duplicarse, alcanzando los 16,000 millones de dólares para 2025. A nivel mundial, el sector superó los 75,000 millones de dólares en 2022 y se proyecta que crezca un 9.5 % anual, llegando a los 155,000 millones de dólares para 2030.

Rosales destacó que las nuevas técnicas y tecnologías, junto con las expectativas generadas por influencers y celebridades, han impulsado la popularidad de los tratamientos no invasivos. “La medicina estética no tiene que ver con bisturíes, sino con inyectables y tecnología”, explicó. Entre los tratamientos más demandados se encuentran la toxina botulínica, los bioestimuladores, los ácidos hialurónicos, las enzimas, los hilos y diversos procedimientos tecnológicos.

Sin embargo, el especialista advirtió sobre los riesgos de acudir a personas no calificadas. “Existen muchos charlatanes promovidos por empresas que distribuyen productos sin registros sanitarios, lo que pone en peligro la salud de las personas”, alertó. Por ello, hizo un llamado a buscar siempre profesionales certificados.

En este contexto, Rosales anunció la cuarta edición del Congreso de Medicina Estética, que se llevará a cabo del 9 al 11 de abril en Guadalajara, Jalisco. El evento reunirá a cirujanos plásticos, dermatólogos, oftalmólogos y otros especialistas relacionados con la cirugía estética, con el objetivo de promover prácticas seguras y actualizadas en el sector.

El crecimiento de la industria estética en México refleja no solo una tendencia global, sino también un cambio cultural en la percepción de la belleza y el cuidado personal, impulsado por la tecnología y las redes sociales.

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