Marko Cortés: violencia desbordada y estrategia equivocada
El presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, ha dirigido severas críticas al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), por su enfoque en la lucha contra el crimen. Cortés afirma que en el país se viven situaciones de violencia cotidiana, con asesinatos, matanzas, desapariciones y secuestros, generando un clima de temor entre la población. A pesar de esto, acusa a AMLO de burlarse y minimizar la situación, optando por «pactar con abrazos para el crimen».
Las críticas de Marko Cortés se sustentan en información preocupante. Según datos preliminares de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), junio de 2023 fue el mes más violento del año en términos de asesinatos diarios en México, con un promedio de 77 casos. Estas cifras evidencian una situación alarmante que exige una respuesta efectiva por parte del gobierno.
El líder del PAN también ha mencionado que su partido buscará corregir el rumbo en 2024 y garantizar que los mexicanos puedan vivir y trabajar en paz. La violencia en México no solo afecta a la población nacional, sino también a migrantes y turistas extranjeros, quienes han sido víctimas de desapariciones, muertes y secuestros, generando preocupación a nivel nacional e internacional.
En respuesta a las críticas, el gobierno de AMLO ha reconocido que su administración ha registrado un mayor número de homicidios en comparación con la gestión de su predecesor, Enrique Peña Nieto. Sin embargo, la situación de violencia y crimen en México es compleja y multifacética, involucrando a cárteles de drogas, corrupción estatal y otros factores. Ante esta realidad, se espera una respuesta contundente y eficaz por parte del gobierno para garantizar la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos.
La violencia desbordada y el cuestionamiento sobre el enfoque en la lucha contra el crimen representan un desafío importante para el gobierno de AMLO. La sociedad mexicana y la oposición política exigen respuestas claras y acciones efectivas para enfrentar esta problemática, y la próxima elección presidencial en 2024 se presenta como un momento crucial para definir el rumbo del país en materia de seguridad y paz social.