Hidrocarburos y Renovables: El equilibrio energético que México anhela para 2024
Expertos y senadores buscan conciliar energías tradicionales y nuevas fuentes en el camino hacia un futuro sustentable y próspero
Ciudad de México – El panorama energético mexicano vive una transformación. Durante el foro “Construyendo la nueva política energética, rumbo al 2024”, líderes del sector enfatizaron que, pese al impulso a las energías renovables, los hidrocarburos siguen siendo vitales para la economía y el desarrollo del país. Sin embargo, la responsabilidad ambiental es una prioridad indiscutible.
La senadora Indira Kempis Martínez, perteneciente al Movimiento Ciudadano, ilustró la coyuntura crítica que vive México en el ámbito energético. A medida que el país enfrenta desafíos en la transición a fuentes más limpias, también debe garantizar el abastecimiento energético para su población. Kempis resaltó el poderoso activo que es la posición geopolítica de México, enriquecido por vastos recursos naturales.
No obstante, la senadora enfatizó la importancia de descentralizar las decisiones y promover una colaboración entre los sectores público y privado. En sus palabras, se trata de construir un México más inclusivo, donde leyes e instituciones actúen como facilitadores de progreso.
Desde el mundo corporativo, Gerardo Ruíz, director General de Índigo Energía e Industria, reflejó un optimismo cauteloso. Si bien el sector energético tiene desafíos, también alberga oportunidades colosales. Ruíz identificó la necesidad de sinergias entre el sector privado, el gobierno y órganos reguladores, con el fin de establecer acuerdos transformadores.
El comentario de Yolanda Villegas, experta en energía, ofreció una perspectiva global del desafío. Destacó la evolución de México hacia la electromovilidad y cómo esto representa una oportunidad para transitar de los combustibles fósiles a fuentes renovables. Sin embargo, la experta advirtió sobre la urgente necesidad de mejorar la calidad del aire, ya que México es uno de los principales emisores globales de gases de efecto invernadero.
El compromiso es claro: lograr un equilibrio entre hidrocarburos y renovables, y guiar a México hacia un 2024 próspero, sostenible y líder en el ámbito energético mundial. La ruta está trazada; ahora es momento de avanzar unidos.
