Centro Militar de Inteligencia espía a opositores sin ninguna restricción

espionaje

Centro Militar de Inteligencia es un centro de inteligencia militar en Mexico que opera bajo la Secretaría de Defensa Nacional ( SEDENA ) y le entrega la información directa al General Luis Cresencio Sandoval González actual Secretario de Defensa Nacional.

Su función es proporcionar apoyo de inteligencia a la Fuerzas armadas mexicanas y otras agencias gubernamentales en asuntos relacionados con la seguridad nacional.

También existe el Centro Nacional de Inteligencia ( CNI ) es otra agencia de inteligencia mexicana controlada por la Secretaría de Seguridad y Protección Civil. Los Policía Federal, entre otras funciones, está a cargo de producir inteligencia táctica criminal oportuna a nivel federal.

Si bien ambos centros están involucrados en la recopilación de inteligencia, operan bajo diferentes agencias gubernamentales y tienen diferentes misiones. CMI se enfoca en brindar apoyo de inteligencia a los militares, mientras que CNI se enfoca en combatir el crimen organizado

Recientemente, ha habido informes de actividades ilegales de espionaje llevadas a cabo por el Centro Militar de Inteligencia utilizando el software Pegasus

Además, Sedena considera necesario generar ‘ inteligencia ’ sobre los grupos cristianos de base de la Iglesia Católica, que estarían cerca de los Zapatistas (EZLN), y también sobre su posición con respecto al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, lo cual muy probablemente incluya a todos los actores políticos de la oposición.

Un informe del Centro Militar de Inteligencia (CMI), un área secreta de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), confirma que en 2020, ya en este sexenio, el Ejército espió al defensor de derechos humanos Raymundo Ramos con el sistema Pegasus.

El secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, recibió la información derivada de ese espionaje, como consta en dicho informe elaborado en 2020 por su subalterno directo Homero Mendoza Ruiz, entonces director del Estado Mayor de la Defensa, y el subjefe de Inteligencia, Conrado Bruno Pérez.

La Sedena utilizó la información obtenida con el espionaje para influir en la investigación que la Policía Ministerial Militar realizaba sobre la ejecución extrajudicial de tres jóvenes, presuntamente cometida por militares el 3 de julio de 2020 en Nuevo Laredo, Tamaulipas.