Qué son y cómo evitar los terrores nocturnos

Los terrores nocturnos pueden son trastornos del sueño que afectan a los niños y adultos 

Qué son y cómo evitar los terrores nocturnos

Qué son y cómo evitar los terrores nocturnos

Ciudad de México, 8 de mayo de 2023.- Los terrores nocturnos pueden son trastornos del sueño que afectan a los niños y adultos . Aqui hay algunas formas de prevenir y manejar los terrores nocturnos segun los resultados de la busqueda:

  1. Establecer una rutina relajante antes de dormir: Realizar actividades tranquilas antes de irse a dormir, como leer, resolver rompecabezas o tomar un baño tibio , puede ayudar a prevenir los terrores nocturnos.
  2. Evitar el cansancio excesivo: Ayudar a su hijo a evitar el cansancio excesivo y asegurarse de que descanse lo suficiente puede prevenir los terrores nocturnos.
  3. Proporcionar seguridad: Las rutinas necesarias al niño seguridad y pueden ayudar a prevenir los terrores nocturnos.
  4. Ser pacientes: La mejor manera de manejar un terror nocturno es ser pacientes ya que, los niños, suelen calmarse y volver a dormir solos en unos minutos
  5. No despertar al niño: No hay que confundir los terrores nocturnos con las pesadillas ya que, de hecho, no son un sueño en sí mismo: son más bien una sensación de miedo que aparece de forma repentina. A diferencia de las pesadillas, que son parasomnias de la fase REM, los terrores nocturnos no provocan que el niño se despierte. Coger al niño por los brazos y agitarlo o gritar podría empeorar la situación
  6. Fijar una rutina regular y relajante para antes de ir a dormir: Realizar actividades tranquilas y que calmen, como leer libros, resolver rompecabezas o tomar un baño tibio, puede ayudar a prevenir los terrores nocturnos
  7. Comunicación con el menor: Facilitar que el menor pueda expresar sus miedos y sospechas puede ayudar a prevenir los terrores nocturnos
  8. Reconfórtalo: Si tu hijo tiene un episodio de terror nocturno, considera simplemente esperar hasta que desaparezca. Observarlo puede ser angustiante, pero el niño no saldrá lastimado. Podrías abrazar y calmar suavemente a tu hijo, e intentaría de nuevo a la cama